La obra
La obra de Carlos Aragón es muy vasta, consta de unos 400 cuadros de gran tamaño, 200 dibujos, estudios y ensayos de arte. ArteAragón cuenta con el catálogo digital completo de su obra, tras la ardua labor de su fundadora Claudia Amelia Aragón, el trabajo de toda una vida. Aquí presentamos algunos de los trabajos de Carlos Aragón.
Selección de curaduría
Las estaciones y los elementos
Para Carlos Aragón, las estaciones son estados del tiempo limitados en el espacio de un planeta. Plásticamente son sentidos, movimientos de apariencias distintas, diferenciados rítmicamente en el desarrollo de una forma común, en sus alternativas vitales, máximas o mínimas. En las 4 estaciones es la Luz, siempre en el circulo solar, que toma distintas versiones, distintas dinámicas y usos cromáticos. La obra de varios cuadros, se titula “4 Soles”, indicando la importancia de este astro solar. Importancia que le han dados todas las civilizaciones del mundo a lo largo de la historia de la humanidad, y lo que Aragón como pensador, se pregunta si no hay un arte que esté ligado a la filosofía de la relación del hombre con el cosmos.
Los elementos son estados fundamentales de la MATERIA. Energías de distinto movimiento orgánico que al cristalizarse originan FORMAS. Para el pintor, “los elementos en el ritmo constante de atracción–oposición conforman el equilibrio de las distintas estructuras”. Podremos observar cómo el estudio de la tétrada, de la geometría sagrada se usa como base para consolidar su obra.
Como decía Da Vinci “la pintura es ciencia”. Me permito citarlo a propósito del aniversario 500 de su muerte, y dado que ATM llega a la Argentina con una conferencia relacionada a su cosmogonía, que como veremos, es también compartida por el artista. Entonces, “la pintura ES ciencia. Porque la pintura nace de la naturaleza. Como todas las cosas visibles fueron producidas por la naturaleza, y estas, sus hijos, han dado a luz a la pintura, deberíamos llamarlo el nieto de la naturaleza y pariente de Dios.” Esto ligado al concepto del Infinito, del origen, o del punto de la espiral, para las culturas andinas.
Carlos Aragón nos presenta un concepto filosófico que responde a su mirada holística e integradora de las culturas. Es importante no limitar la interpretación a los elementos a los 4 occidentales. De hecho para las culturas orientales, los elementos son cinco: fuego, tierra, aire, agua y éter o espíritu. Este último, espíritu u alma, podría ser el observador, podríamos ser nosotros mismos, que al observar los 4 elementos presentes en la obra , nos integramos para conformar el pentalpha. Concepto pitagórico y esotérico, que nos lleva a reflexiones más profundas del nuestro propio origen.
La seria de la luz
La serie de la Luz consta de 6 cuadros de 1,20 x 0,80 mt., hechos en acrílico sobre aglomerado. Realizados entre 1977 y 1982, es una Obra que estudia la relación del color y del sonido para producir ritmo y proporción áurea.
Es un ritmo cósmico con un alto contenido de simbolismo poético. Carlos Aragón trata el estudio de la Luz como la representación del espíritu de las formas. Quiere proyectar una visión de lo oculto, “hacer visible por la imagen plástica, el universo no visibles de las formas”.
Presenta al ser humano integrado con la naturaleza y el cosmos. Relación del origen como fuente de evolución cultural, de desarrollo y la luz como fuente de inspiración, de conocimiento. Esa eterna búsqueda hacia la luz, la razón, la Gnosis.
Martín Fierro
Por último, hemos llegado a la magnífica obra del Martín Fierro. Argentina fue uno de los primeros países hispanoamericanos en consolida una literatura como tal, propiamente individualista que reflejaba las condiciones históricas ligada e inseparable del contexto político.
Martín Fierro, un poema narrativo argentino, escrito en verso por José Hernández en 1872, se consolida como uno de los textos más importantes no solo en la literatura argentina, sino que con el tiempo adquirió el carácter clásico.
Este poema clásico narra el modo heroico del gaucho Martín Fierro. Este personaje posee un carácter independiente y sacrificado. Trabajador de las pampas, vive con su familia, es reclutado forzosamente a servir en el fuerte para defender la frontera argentina contra los indígenas del territorio. Al regresar encuentra que su familia fue muerta, y tras batirse a duelo, se transforma en fugitivo de la ley. Con un nuevo mejor amigo, se insertan en el desierto de para vivir entre los indios, esperando encontrar una vida mejor. Esto ES lo que ocurría realmente a nivel socio-político en la Argentina entre 1860 y 1880.
El gaucho, mezcla de indios con mestizos, lleva un doble sello telúrico en su identidad. El Martín Fierro es un símbolo de protesta contra las injusticias y la explotación de hombre por el hombre. Refleja una vez más la desaparición de una clase sometida, en el momento exacto de su insipiente desaparición. Y el gaucho se convierte en el símbolo nacional argentino, otorgando a la obra un carácter trascendental, tanto en su forma, como en su contenido.
José Hernández escribe el Martín Fierro en la ciudad de Ayacucho, La Pampa Argentina, que es también el lugar de nacimiento de Carlos Aragón. Ciudad de muchos hitos para nuestra historia argentina. Ambas piezas presentan una relación estrecha entre dos identidades, con enfoques distintos sobre la marginación: la del indio y la del gaucho.
En este período el indio conserva las siguientes características: son cazadores y recolectores, son nómades, se agrupan el tolderías, se ve la injerencia de la conquista española, mantenían sus religiones chamánicas, utilizaban como armas lanzas y las boleadoras (que el gaucho adopta como herramienta propia para sus tareas en el campo. Son también producto de una mezcla racial, y sufren un genocidio a manos de los políticos de la época.
El gaucho es una identificación de la tradición entre dos culturas con los siguientes rasgos: tiende a ser nómada, a ir a donde está el trabajo, por necesidad y por presiones sociales. Generalmente analfabeto y con creencias religiosas mixtas, pero que se autodenomina “cristiano”, y esto lo diferencia del indio. Se vate a duelo con cuchillo (nosotros le llamamos facón). Utiliza la guitarra como instrumento que si bien es de origen español andalusí, se convierte en nacional, lo que denominamos la guitarra criolla. Para nosotros esto conserva un fuerte componente de tradición oral, incluso con el duelo, mediante la palabra. En argentina esto se conoce como Payada, y es el intercambio de ideas que pueden culminar en duelo de cuchillos. Se sigue integrando como puntal de la tradición argentina en general, el intercambio en verso, de los pensamiento del hombre. Por eso tan propio para su época que el escrito del MF sea una poema.
Carlos Aragón llevó a cabo una serie de 15 cuadros, pintados en acrílico sobre hardboard, de 1,20 x 0.90. Son enormes obras sobre el Martín Fierro con sus escenas más icónicas. Realiza la serie en honor a su ciudad natal, en 1986, y el autor mismo, dedica la obra “al Gaucho, a los fundadores de Ayacucho”. Sobre la composición de esta obra, la describe como “geometría de la luz, el color y la forma. Espacio y tiempo, presencia telúricas en el plano, y profundidad fundidos en el horizonte, sin fin del cielo y de la tierra”. Está última serie del Martín Fierro está a su vez inspirada en una obra previa de Aragón, de 1984, titulada “Bajo la Cruz del Sur”.